La Naveta des Tudons, el monumento más emblemático de la Isla, con torres eléctricas en su entorno. | Josep Bagur Gomila

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El Consell saca a concurso tres contratos menores para cumplir las recomendaciones de Icomos, al conceder a la Isla el título de Patrimonio de la Humanidad por sus monumentos prehistóricos. Eso es, redactar un plan director para los yacimientos de la Naveta des Tudons y los poblados de Torrellafuda y Torretrencada; elaborar un estudio sobre el impacto visual de los tendidos eléctricos y de telefonía sobre los monumentos; y planificar la estrategia de gestión de riesgos y hacer un plan de adaptación al cambio climático para mitigar sus efectos sobre los bienes patrimoniales.

Las tres convocatorias se han publicado este jueves y los interesados podrán presentar sus ofertas en un plazo de entre 25 y 30 días. En el caso de la redacción del plan especial, se ofrece un contrato de 11.875 euros (más IVA); para analizar la afectación de los cableados se pagarán un máximo de 10.650 euros (más IVA); y para confeccionar el documento relativo al cambio climático, 6.500 euros (más IVA).

El plan director para la Naveta des Tudons y los poblados de Torretrencada y Torrellafuda deberá fijar los ejes de la planificación de las actuaciones y las líneas prioritarias en diversos campos. Más concretamente, referido a las investigaciones sobre estos yacimientos; la conservación y restauración de sus elementos arquitectónicos; acciones de difusión y potenciación de las visitas; la museización y adecuación de los recintos para recibir visitantes; la gestión por parte de las administraciones implicadas en el plan director; o fórmulas de financiación para hacer viable el plan director.

El equipo redactor tendrá que contar con la opinión de los propietarios de los monumentos y, en el caso de Torrellafuda, también de los arqueólogos que han investigado allí los últimos años.

Cableado aéreo

Sobre el impacto visual que causan los tendidos eléctricos y telefónicos se analizarán y se propondrán medidas (desviar trazados, soterrar, pantallas vegetales) para los nueve conjuntos monumentales de la Menorca Talayótica. Los principales monumentos de cada uno son la Naveta des Tudons, Torrellafuda y Torretrencada; Son Catlar; Son Mercer de Baix; Galliner de Madona, Cova des Coloms y Sant Agustí; Torre d'en Galmés, Na Comerma de Sa Garita y Ses Roques Llises; Torralba, Rafal Rubí, Torrellissar, So Na Caçana y Calescoves; Talatí de Dalt, Cornia Nou y Torelló; Trepucó; y Torreta de Tramuntana. Además, también se incluye la necrópolis de Cala Morell, pese a no formar parte de la Menorca Talayótica.

El director de la Agencia Menorca Talayótica, Antoni Ferrer, explica que «no solo se trata de cableados que hay cerca de yacimientos, sino también los que se ven desde allí», ya que la declaración de Patrimonio Mundial se fundamenta y da valor, precisamente, a la integración de los monumentos en el paisaje. Así, y aunque será el estudio el que lo determinará, Ferrer cita casos como la Naveta des Tudons, el monumento insular más emblemático, cerca del cual pasan líneas de alta tensión. O So Na Caçana, donde la red eléctrica «pasa prácticamente por dentro del yacimiento».

Las claves
  1. Plan director para la Naveta des Tudons, Torretrencada y Torrellafuda

    Son los principales escenarios de uno de los nueve conjuntos monumentales de la Menorca Talayótica. Su complejidad hace necesario contar con un plan director específico, para ordenar y planificar las actuaciones que se lleven a cabo en los tres recintos.

  2. Reducir el impacto visual del cableado aéreo en el paisaje de los yacimientos

    Icomos pedía reducir el impacto que representan las líneas eléctricas y de telefonía para los yacimientos. Así, se elaborará un documento que describa el grado de afectación en cada conjunto, proponga soluciones para minimizarlo e incluya valoraciones económicas.

  3. Asegurar que se conservan los bienes ante los efectos del cambio climático

    Se trata de analizar los riesgos potenciales de posibles desastres naturales, por los efectos del cambio climático e, incluso, los producidos por la actividad humana. El objetivo es proponer medidas y actuaciones para mitigar su afectación sobre el patrimonio.