Martí Riera, en el último avituallamiento

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Jornada histórica la que se vivió ayer en Vigo, en Galicia, donde el nadador adaptado de Fornells, Martí Riera –con una lesión medular desde hace años– se convirtió en el primer nadador en silla de ruedas en enfrentarse a las frías aguas de la XII Batalla de Rande gallega; los 27 kilómetros que separan Cíes de San Simón. «Voy a intentar acabarla», decía horas antes. Y tanto que lo logró. Con salida programada a las 10 horas desde la playa de Rodas, en las islas Cíes, con traje de neopreno y unas aguas que rondaban los 14-15 grados –dos novedades para Riera–, siete años después de atar el Canal de Menorca, Martí volvía a desafiarse a sí mismo y no defraudó, siendo ‘finisher'.

Riera llegaba a San Simón en el puesto 48 y con un tiempo final de 8h:21' en una Batalla de Rande que empezaría el forneller con fuerza y templanza, llegando ya al primer avituallamiento nadando «muy bien». «Comió mucho, está bien atendido», nos señalaban desde la misma barca de acompañamiento para «Es Diari». Serían las 17:30 horas cuando el nadador menorquín acumulaba ya 25 kilómetros a nado y le faltaban tan solo dos, pasando el puente, hasta la meta.

Riera, tras terminar la prueba

Riera, para este diario y nada más completar la gesta, exclamaba que era «‘finisher', estoy muy contento. Pero sí, ha sido muy, pero que muy dura», exclamó. La organización de Rande, que en su día también hizo y con nota Tita Llorens, se congratulaba de poder contar con Riera, «el primer participante en silla de ruedas de las doce ediciones de nuestra travesía a nado, la batalla de los sueños», resaltaban.