El fútbol que viene

Poca broma con este asunto porque, por un lado, estamos hablando de la máxima categoría del fútbol nacional juvenil -más allá tan sólo quedaría la Copa del Rey, reservada a los campeones de cada grupo-; y por otro, si nos ceñimos al depauperado aspecto que presenta el fútbol isleño para la temporada 2012/13 comparado con anteriores ediciones, quien quiera ver fútbol con equipos de solera y tradición, se tendrá que acercar al Estadi Maonès los domingos a mediodía.

Ayer empezaron a poner la primera piedra los treinta jugadores con el primer entreno comandado por el técnico Lluís Vidal. Una primera toma de contacto en el que se mezclaron los 16 jugadores que quedan de la temporada anterior, más lo mejorcito de los clubes juveniles de la isla y cuatro futbolistas de fuera (Lorenzo, Mohamed Alí, Dominic y Eduardo Rodríguez). De todos ellos, Vidal se quedará con veintidós, con el objetivo de hacerlo lo mejor posible... y conservar una categoría a la que ha costado muchísimo llegar.

"Estamos con mucha ilusión y sabemos la importancia que tiene participar en la División de Honor. Además, tal y como está deportivamente la isla, es una gran responsabilidad", indicaba el técnico Lluís Vidal minutos antes de dirigir el primer entreno de la pretemporada. ¿Objetivos? "Primero de todo conocernos bien, analizar lo que tengo.

Obviamente, lucharemos por mantenernos en la categoría, algo que será muy complicado pero que nos ilusiona. ¿Estilo de juego? Bueno, no quiero cambiar lo que hemos hecho históricamente, intentando hacer un juego teniendo el balón".

En cuanto a los refuerzos, "tenemos a lo mejor de la isla siempre de acuerdo con los clubes" dijo de los menorquines, de los foráneos "vamos a ver cómo se adaptan y esperamos que funcionen" y sobre el goleador Marc Fraile fue muy sincero.

"Simplemente, espero que no esté con nosotros, porque significará que tiene futuro en el Betis", equipo en el que está a prueba estos días.