Ahí, al paso por el cien, reaccionaron las calles centrales para rematar la prueba en el último 'rush', en el que el húngaro Hubert Kos cumplió con los pronósticos para alzarse con autoriidad con la medalla de oro y el cetro olímpico (1:54.26), por delante del griego Apostolos Christou (1:54.82), plata, y el suizo Roman Mityukov, bronce con 1:54.82. Por su parte, Hugo, en sexto lugar, logró una marca de 1:55.47, pagando el esfuerzo inicial ante el empuje de sus rivales, en especial un Kos que desde la calle 4 tomó la iniciativa para imponer sus galones.
El nadador palmesano, que renunció por la mañana a nadar las series de los 200 estilos para centrarse en el asalto a las medallas en la distancia en la que es vigente campeón del mundo, salió desde la calle 8 al firmar la última marca de clasificación (1:56.52), topando con rivales de entidad, especialistas de su nivel en esta prueba, en la que era la gran esperanza española de medalla en la piscina de La Defense, en la que por ahora ha acumulado dos diplomas a la espera del relevo 4x100 estilos, con el que completará su concurso, en una prueba en la que competirá junto al malllorquín Sergio de Celis.
Pese a su ambición por intentar firmar una buena marca y pelear por su primera medalla olímpica, saliendo delante en el primer tramo, el 1:55.47 de Hugo González, a más de un segundo del oro y ocho décimas del podio, está por encima de la marca firmada el pasado mes de junio en el Campeonato de España celebrado en las piscinas de Son Hugo, donde batió el récord nacional para dejarlo en 1:54.51, mientras que en el Mundial de Doha, a principios de año, el balear firmó un tiempo de 1:55.30 que le dio el oro. En París, toca sumar otro diploma y repetir la sexta plaza del 100 espalda y de Tokio. Un listón que se antoja psicológico para Hugo González.
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