'Lete', en el centro de la imagen, en la despedida oficial del Atlètic Ciutadella el pasado mes de abril. | Katerina Pu

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El mundo del fútbol menorquín y en especial del desaparecido Atlètic Ciutadella vuelve a estar de luto. Este miércoles fallecía de manera repentina Gabriel Bagur Taltavull, más conocido en el mundo del fútbol en Ciutadella como ‘Lete’. El ciutadellenc, con poco más de 70 años de edad y que disfrutaba de su jubilación tras ser conocido también por su profesión de pastelero, fue uno de los jugadores más destacados de la época dorada del potente en aquel entonces Atlètic Ciutadella y siendo un habilidoso centrocampista e interior, se mostró siempre como un futbolista de gran talento en el terreno de juego entre los años 60 y 70.

Jugador muy técnico e implicado- «de equipo», dicen hoy algunos de sus ex compañeros-, ‘Lete’ además de aportar en el campo su enorme calidad lo hacía en el vestuario, ya que a pesar de su semblante serio, daba vida y ayudaba a los más noveles del equipo, «siempre chistoso».

‘Lete’ jugó prácticamente siempre en su Atlètic Ciutadella e incluso llegó a militar un par de temporadas en el Sporting Mahonés, que fue donde, para muchos, acabaría explotando y mostrando su clase definitivamente. Tras su paso por Maó, todavía regresaría al Municipal de Sant Antoni, para defender los colores de su club bermellón. Entre otros muchos logros de ‘Lete’, el histórico ascenso a Tercera División el curso 1971-72. Aquel conjunto bermellón estaba dirigido por el técnico argentino Mario Leardi y la plantilla la formaban, entre otros, por Faner, Prats, Serrano, Nando Genestar, el propio ‘Lete’, Carlos, Rivas, Mora o Arturo, para luego aterrizar los Epi Medina, José Fluvià Pio, Fiol, Galdona y Massanet.

El pasado mes de abril, en la despedida oficial del Atlètic Ciutadella como entidad tras acordar la creación de Ciutadella Club Esportiu, ‘Lete’, junto a otros ex atléticos, estuvo en el Municipal de Sant Antoni, en un día histórico y recordando antiguas batallas. Un hombre discreto y que siempre se quiso mantener en un segundo plano, pese a que su nombre sonó siempre con fuerza en el fútbol.