Juan Romero, junto al escudo del Atlético Villacarlos, en la Zona Esportiva Sergi Llull de Es Castell.  | A.V.

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Juan Romero inicia un nuevo ciclo en su trayectoria dentro del Atlético Villacarlos, cuyo primer equipo dirigirá en la temporada que arranca este fin de semana. El entrenador mahonés confiesa su admiración hacia el club de Es Castell por su histórica capacidad de generar tantos jugadores talentosos en uno de los pueblos más pequeños de la Isla, además de abordar otros aspectos relacionados con el ‘planetas fútbol’.

¿Cuál será la clave para tener éxito esta temporada?

—Somos un equipo renovado, con mucha juventud junto con algún veterano. La clave de cualquier equipo es precisamente hacer equipo, pero creo que al final lo importante es que tengo jugadores muy implicados y es un equipo que escucha mucho, que entrena fuerte y pasándolo bien. Deberemos conseguir la continuidad, los resultados siempre son importantes y deben acompañar, pero lo más determinante para conseguir resultados es que hagas todo lo correcto y el máximo esfuerzo para que lleguen.

¿Qué le hizo decidirse a venir al Villacarlos?

—Después de tantos años en Preferente menorquina, recibí la oferta de entrenar a los juveniles y me pareció interesante volver. Es una categoría donde puedes motivar mucho a los jugadores y donde todavía tienen la ilusión de hacer algo en el mundo del fútbol, la decisión fue simple, salió una temporada buenísima y fue una decisión acertada.

¿Qué opina del nivel de la Liga Regional para esta temporada?

—Tras un año en categoría juvenil no estoy inmerso al cien por cien, pero conozco la categoría y muchos jugadores. Creo que lo que puede pasar este año es que haya cuatro o cinco equipos que estén en la zona alta y después una serie de equipos que intentaremos dar la sorpresa.

¿Cuál debe ser el objetivo del club? ¿Hay posibilidades de ascenso?

—No pienso en el ascenso, primero tengo que hacer el equipo, poco a poco. Estoy contento con estas semanas que llevamos entrenando, pero será el tiempo el que nos colocará en un sitio u otro y en función de nuestro rendimiento podremos valorar durante la temporada veremos hasta dónde podemos llegar. Ahora debemos tratar de hacer grupo, equipo y luego veremos las posibilidades reales que tenemos.

El fútbol menorquín ¿Actualmente está en el buen camino?

—Es un tema del que podríamos charlar con mayor profundidad, siempre si quieres mejorar debes aspirar a más, pero también debes saber que estamos en una isla pequeña, donde no hay tantas fichas como en otras comunidades. Tenemos lo que tenemos, hay categorías donde contamos con pocos equipos y por tanto con pocos jugadores y esto resta competitividad a sus competiciones. Tener dos equipos en Tercera y tres en Liga Nacional Juvenil es algo que deberíamos mantener.

¿Cree que salen suficientes jugadores profesionales de Menorca?

—El hecho de ser jugador profesional de fútbol ya es difícil, y si has nacido en Menorca la dificultad se multiplica exponencialmente. Podemos coger casos como Xavi Sintes o Álex Quevedo, los más recientes. Lo que demuestra es que siempre hay una oportunidad que alguien puede aprovechar, pero más que continuar con los jugadores profesionales que salen, lo que sí podría decirte es que hay muchos profesionales a raíz del fútbol. Conozco a varios jugadores que entrené que a día de hoy son podólogos, fisios, preparadores físicos... y cuando pasan los años te das cuenta de que es gracias al fútbol.

¿Cuál es la filosofía que le inspira a entrenar?

—Mi filosofía es mejorar jugadores, transmitirles la ilusión por este deporte, pues al final son un grupo de personas que debes saber tratarlos, todos son diferentes a su manera, por lo que debes tener la capacidad de percibir cómo es cada uno, todos están dentro de un equipo, pero sí que es verdad que hay jugadores que son de una u otra forma y tienes que saber mirar de acuerdo con el trato personal y conseguir que saquen el máximo rendimiento deportivo por su bien y el del equipo.

¿Cuál es el factor común que une a los buenos entrenadores?

—Los entrenadores son como los jugadores, hay jugadores que son muy buenos tácticamente, pero no técnicamente y viceversa, otros que tienen condiciones físicas destacables... los entrenadores es algo parecido. Hay entrenadores que son muy tácticos, hay entrenadores que son mejores gestores de grupos, otros que tienen un trato humano buenísimo, otros que charlan poco...    creo que al final si vamos a buscar el factor común, es que los jugadores quieran jugar con entrenadores que mejoren su rendimiento.