Ante un año ilusionante

Ante un gentío considerable desfilaron los cerca de 200 jugadores que cuenta el club, además de las 80 patinadoras que integran su emblemática sección de patinaje, tras lo que llegó el turno de los parlamentos. El presidente José Saavedra, así como la representación institucional, tomaron la palabra, siendo después el momento del propio Romero.

El máximo responsable de la parcela deportiva unionista sorprendió con una proclama tan inusual como emotiva. También llena de sentido, en la que, tras recordar la necesidad de potenciar valores como «solidaridad, trabajo o esfuerzo, que a menudo se pierden por el camino», aludió a la figura de los abuelos, un eslabón fundamental en las familias de hoy día, y grandes «valedores de esos valores como el sacrificio o el esfuerzo». El técnico admitió emocionarse cuando ve «lo que llegan a hacer los abuelos por los niños, como disfrutan viéndoles jugar y el tiempo que se quitan de sus vidas para entregarlo a los nietos; merecen toda nuesttea consideración».

En lo que concierne al ámbito estrictamente futbolístico, «dar continuidad al trabajo iniciado hace un año», expone Romero, es el punto de partida para el nuevo curso. «El año pasado organizamos el club a nivel deportivo y este año queremos mantener esa dirección, además de seguir una línea en el estilo, queremos que todos los equipos de la Unión apuesten por un juego muy similar. Es importante para convencer a los niños de lo que hacemos», abunda Romero, satisfecho asimismo por «el incremento» de alumnos en la Escoleta, «lo que es síntoma de que hacemos las cosas bien».

«Seguir creciendo desde la base, intentar el ascenso a Liga Nacional Juvenil, y que el primer equipo de un paso más», son otras de las metas que impone Romero para este curso, en que la Unión activa once equipos con representación en todas las categorías.