El informe del Ministerio de Sanidad refleja que somos una de las comunidades españolas con la ratio de enfermeras más baja. | R.L.

TW
16

El Ministerio de Sanidad considera que se necesitan entre 3.000 y 3.800 enfermeras en esta comunidad para llegar a la media europea, más de cien mil harían falta en todo el país para estar en el promedio de los países de la Unión. Una situación que, al ritmo actual de crecimiento, en las Islas tardaremos en alcanzar en un plazo de entre 19 y 24 años.

Son cifras recogidas en el informe ‘Situación actual y estimación de la necesidad de enfermeras en España, 2024’, elaborado por el Ministerio con la colaboración del Instituto Carlos III.

«Son datos que llevamos años reivindicando y, la verdad, es muy positivo que por fin un organismo oficial reconozca esta realidad y nos de la razón», expresa Jorge Tera, secretario general en Baleares del Sindicato de Enfermería Satse.

El estudio refleja que 7.346 enfermeras atienden actualmente en las Islas a una población que supera los 1,2 millones de habitantes. Eso supone una ratio de 5,93 enfermeras por cada mil habitantes.

A una gran distancia de la ratio europea, de 8,5 enfermeras para cada mil habitantes y por debajo también de la media española (6,28). Baleares es una las cinco comunidades con peores datos, junto con Andalucía (5,51); Galicia (5,13) Comunidad Valenciana (5,46) y Murcia (4,79).

Maria José Sastre, presidenta del Col·legi Oficial d’Infermeres de Balears (COIBA) coincide en valorar este déficit de enfermeras como un problema histórico en nuestra comunidad. Solicita inversiones urgentes no sólo para aumentar las plantillas también para «asegurar el bienestar de las que ya están al sistema porque la situación actual hace que muchas se planteen dejar la profesión», expresa.

En este sentido, el informe refleja que casi el 40 por ciento de las enfermeras encuestadas planea dejar la profesión ante las condiciones salariales, la falta de reconocimiento profesional y la falta de liderazgo.

Tera y Sastre inciden en que la falta de estabilidad, de buenas condiciones laborales y de desarrollo profesional, la carga de trabajo, ligado con el problema de la vivienda y del alto coste de la vida en las Islas, hacen que cada vez seamos un territorio menos competitivo y que muchas de las profesionales se decanten por otros destinos. Solicitan una contratación más estable y mayores incentivos para retener profesionales.

El informe refleja además que solo el 34,5% tiene un puesto acorde a su preparación. Desde el COIBA muestran su preocupación ante el bajo número de profesionales con plaza de su especialidad. «Se están invirtiendo recursos en formar especialistas y cuando acaban no tienen garantizado un contrato de su especialidad», lamentan. El Satse también pide que se reconozca el nivel profesional y se fomenten los puestos de gestión.