Imagen compartida por el ministro Óscar Puente, utilizando la platilla de la organización de ayuda a personas desaparecidas.

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Salta una nueva polémica protagonizada por el ministro de Transportes, Óscar Puente. La Asociación de ayuda para localizar a personas desaparecidas, SOS Desaparecidos, ha criticado públicamente que el ministro haya utilizado su plantilla con fines de sátira política. Puente ya dio pie hace unas semanas a una crisis diplomática entre Argentina y España por unas controvertidas declaraciones sobre su presidente, Javier Milei.

En concreto, Puente ha utilizado el diseño que la asociación utiliza para difundir los rostros de personas desaparecidas, con tal de ayudar a su localización, para hacer burla sobre la candidata del PP a las elecciones europeas del próximo 9 de junio, Dolors Montserrat. Puente ha añadido su cara al diseño, como si se tratara de uno oficial para dar con ella. Acompañando la imagen, escribía: «Si eliges a alguien para que encabece una lista, se supone que es lo mejor que tienes. Si a la mejor persona que tienes la escondes, mucho no confías en ella. Y si no confías en ella y aún así la pones porque es lo mejor que tienes, ¡cómo será el resto!».

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Al montaje visual le acompañaba el nombre de la candidata, así como otro mensaje: «Desaparece el tercer día de campaña electoral para las elecciones al Parlamento Europeo tras un debate con Teresa Ribera [candidata del PSOE a las europeas]».

Apenas dos horas después de la publicación del tweet, SOS Desaparecidos ha criticado con dureza al ministro, recordando que «detrás de este formato hay historias tristes y dramáticas». «Difunde una falsa para hacer crítica política, si a esto se le puede llamar así, espero que mañana difunda una real y haga usted un ejercicio de solidaridad», ha añadido la asociación en la misma red social. óscar Puente finalmente ha acabado borrando la publicación de su perfil.

Una polémica que se suma a la de Argentina

Solo hace unas semanas que el ministro de Transportes era diana de los medios de comunicación, metido en una polémica sobre sus declaraciones durante un mitin del PSOE, en el que daba a entender que el presidente de Argentina, Javier Milei, había consumido drogas, debido a su actitud al salir a celebrar la victoria electoral. Las palabras llegaron a Argentina y prendieron la mecha de una crisis diplomática, que después se agravó con la visita de Milei a España, en la que el presidente criticó en la cumbre de partidos de ultraderecha que organizó Vox: «No saben qué tipo de sociedad y país puede producir el socialismo y qué calaña de gente atornillada en el poder y qué niveles de abuso puede llegar a generar. Aún cuando tenga la mujer corrupta, se ensucia y se tome cinco días para pensarlo». De momento el conflicto diplomático sigue candente y se ha saldado con la retirada de la embajada española de Buenos Aires.