Se trata de un plato español muy famoso en Canarias. | Pixabay

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Según los expertos en nutrición, las patatas arrugadas canarias se posicionan como la forma más saludable de consumir este alimento. A diferencia de las patatas fritas o asadas, este método de cocción permite conservar la piel, que está repleta de fibra y nutrientes como vitamina C y potasio. Además, las papas arrugadas tienen un bajo índice glucémico y aportan antioxidantes, lo que las convierte en una excelente opción para quienes buscan mantener una dieta equilibrada​.

El proceso para hacerlas implica cocer las patatas en agua con sal hasta que su piel se arrugue, lo que, además de darles su distintivo sabor, evita el uso de grasas añadidas como en otras preparaciones más tradicionales, como el puré o las papas fritas.

Las patatas arrugadas son una opción baja en calorías y una fuente de carbohidratos complejos, lo que proporciona energía de manera constante. Además, consumirlas con la piel aumenta el aporte de fibra, que ayuda a mejorar la digestión y aporta una mayor sensación de saciedad. A esto se suma la vitamina C, un antioxidante clave que ayuda a fortalecer el sistema inmunológico y proteger las células del daño oxidativo.

Otra ventaja es que esta preparación ayuda a regular los niveles de azúcar en la sangre, lo que resulta beneficioso para personas con diabetes o aquellos que buscan controlar su ingesta de carbohidratos de rápida absorción.