Menorca05/09/24 17:00
Con especial atención al detalle, la marca menorquina Barba-Rossa lleva desde la pandemia diseñando casi todos los artículos que se pueden encontrar en sus mostradores. Nació en 2002 y se diferencian del resto por el hecho de que sus pulseras, colgantes y cinturones se hacen en Menorca, como es el caso del Shackle Watch, su primer reloj. Este se caracteriza por estar insertado en un grillete náutico, además de estar equipado con un movimiento automático de alta precisión, cristal de zafiro y un diseño estanco. Se trata de una pieza ensamblada a mano, «una obra maestra artesanal, concebida y fabricada en Menorca, pensada para los verdaderos coleccionistas y amantes del mar».