Suceso. La agresión a los agentes tuvo lugar en la zona de bares de Son Bou durante la madrugada del jueves - Archivo

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Dos agentes de la Policía Local de Alaior resultaron heridos durante la madrugada del pasado jueves en Son Bou. Según explica el concejal de Policía y Personal del mismo municipio, Arturo Pons, los hechos ocurrieron a las seis de la mañana, hora de cierre de varios locales de ocio de la zona, cuando los dos policías de servicio acudieron tras conocer que un grupo de unas setenta personas estaba rompiendo botellas en la urbanización.

Tras llamar la atención al grupo de jóvenes, éstos atacaron a los dos agentes, que sufrieron fuertes contusiones en la nuca y en el pecho mientras intentaban retener a uno de los chicos. "Hubo una especie de reyerta y, tras el ataque y en un momento de confusión, los agresores huyeron corriendo. Se está indagando para poner la denuncia correspondiente", explica Pons.

Cabe recordar que estos días Son Bou ha acogido a más de mil estudiantes menorquines de entre 14 y 20 años, quienes alquilan apartamentos para pasar sus días de vacaciones tras finalizar el segundo trimestre. La urbanización es desde hace unos años la zona escogida para realizar estos encuentros en los que, según algunos empresarios y vecinos, abundan el alcohol, las peleas y los destrozos.

"Son Bou se ha puesto de moda para hacer esto y allí acude gente joven para pasarlo bien, pero el problema es que también van personas conflictivas que buscan problemas. Cada año nos encontramos con que no estamos preparados para recibir grupos tan masivos.

Hacemos lo que podemos dentro de nuestras posibilidades", dice Pons.

Precisamente, CCOO ha querido denunciar la situación en la que se encuentra la Policía Local de Alaior. Según el sindicato, "era cuestión de tiempo que, debido a los recortes tan salvajes que ha realizado la alcaldesa Sugrañes y el concejal Pons, ocurriera un suceso como el de Son Bou". Y es que, explica CCOO, durante la pasada Semana Santa tres agentes sufrieron agresiones y lesiones durante su jornada laboral. El primero de ellos recibió un mordisco de un perro que había mordido a una niña, provocando al agente una infección y dos días de baja con reducción de sueldo.

Los otros dos policías son los que estaban de servicio en Son Bou. "Eran los dos únicos agentes en todo el término, que no pudieron llamar a refuerzos porque no había. Desde CCOO consideramos responsables políticos directos de la inseguridad de los agentes y de la ciudadanía a la alcaldesa Sugrañes y al concejal Pons, que explican la disminución de efectivos diciendo que "aquí nunca pasa nada y la Policía Local es prescindible". Exigimos su dimisión inmediata por los graves hechos", concluyen.

Por su parte, Arturo Pons apunta que "CCOO aprovecha este incidente aislado para incidir en el tema de los recortes". El concejal asegura que el servicio está cubierto de manera eficiente. "No ha habido más problemas de los normales en Son Bou y, además, contamos con la ayuda de la Guardia Civil. Este hecho puntual puede suceder aunque haya más plantilla. Como cada año hay más jóvenes, se puede ver si merecería la pena una colaboración con la Policía Nacional, ya que estamos hablando de una reunión de casi dos mil personas. Lo que no se puede hacer es crear una alarma porque lo que ha pasado es un caso aislado".

Alaior cuenta con cerca de treinta policías locales y, en unos días, se incorporarán cuatro policías turísticos que trabajarán hasta final de año.