Descarte. El alcalde apuesta por comprar una casa ante lo difícil que es ejecutar un proyecto de 2 millones - Gemma Andreu

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El equipo de gobierno del Ayuntamiento des Migjorn Gran está "en conversaciones" con la propiedad de un "casat" para comprar el edificio que pueda albergar las futuras casas consistoriales del municipio. Una opción que se abre una vez descartado el anteproyecto que contemplaba levantar una nueva sede en el mismo solar en el que anteriormente estaban ubicadas las dependencias y donde aún está el salón de plenos.

Así lo explicó ayer el alcalde de la localidad, Pere Moll, quien señaló que el proyecto que había sobre la mesa implicaba una inversión demasiado alta, y más ahora. "Hay un anteproyecto de 2 millones de euros para un edificio que además es demasiado modernista para lo que es el casco antiguo des Migjorn. Por eso, desde el Ayuntamiento queremos un 'casat', y estamos en conversaciones con los actuales propietarios". Y es que Moll admitió que "estamos dispuestos a asumir la compra, pero necesitaremos ayuda para la rehabilitación". Moll no quiere desvelar aún cual es el caserón, pero sí señaló que no está en el centro sino más a las afueras. Aunque "aquí todo está cerca", dijo.
más económico

La alternativa que plantea el equipo de gobierno responde a que "es más barato comprar y rehabilitar que hacer el edificio nuevo". Aún así, Moll afirma que, en cualquier caso, Es Migjorn precisará ayuda del Consell y del Govern balear para hacer realidad las nuevas dependencias municipales, unas instalaciones que el alcalde considera "una obra prioritaria" para el municipio.

Moll recuerda que en 2001 se firmó un acuerdo a tres bandas con el Consell y el Govern que comportaba que éstas aportarían un total de 540.000 euros. "Pero el convenio no se llevó a cabo, y en octubre de 2010 expiró. Luego el pleno aprobó pedir la prórroga del convenio, pero el Govern nos dice que habrá que firmar uno nuevo y el Consell no nos ha contestado", afirma el primer edil migjorner.