No es que desee delinquir, pero todos aspiramos a pasar una temporadita a la sombra. No está demostrado que el calor funda las neuronas ni que el lúpulo (o cerveza) las reanime. Este verano nos pasamos el tiempo apagando incendios y surfeando sobre olas de calor y de virus. La película que rodamos en la isla se llena de extras para pasar del intimismo invernal a la superproducción veraniega. Es difícil de creer el dinero que se mueve por metro cuadrado en estos momentos, también la cantidad de pobres que van apareciendo a raíz de la enésima crisis, pero por muy difícil que sea creer, la realidad es tozuda y acabaremos por caernos del caballo. La realidad es cruda, variopinta, enigmática e inmensa. No podemos abarcarla toda, solo navegar por ella: unos de manera real con su yate, otros de forma virtual con su pantallita.
Sin flash
A la sombra
24/07/22 3:59
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