El Tribunal Superior de Justicia Europeo dictó sentencia en 2017 sobre las líneas de atención al cliente con sobrecoste y declaró su uso ilegal en servicios postventa de empresas. Entre estos números estaba el 902. El tribunal dejaba claro que el coste de una llamada de asistencia no podía superar el coste de una llamada a una línea telefónica fija geográfica o móvil estándar. Ahora bien, si las empresas ofrecían un número alternativo cuyo coste no superara el de una llamada normal, nada impedía que tuvieran también el de tarificación especial. Hecha la ley, hecha la trampa. El 902 se sigue usando y llamar con este prefijo sale más caro que hacerlo a cualquier otro número con prefijos provinciales. El teléfono caro es visible en contratos o en webs, permite una conexión rápida, y el otro aparece escondido o en letra diminuta. Y como tendemos a lo fácil pues muchas veces marcamos sin pensar en que hoy, ser consumidor o usuario, es caminar por un campo de minas. A ver cómo y cuándo te la cuelan.
Vía libre
El secreto está en el prefijo
31/12/19 0:00
También en Opinión
- Retenciones en la carretera general de Menorca por culpa de un tren turístico
- Un calamar de grandes dimensiones sorprende a los bañistas en la playa de Son Bou
- La menorquina, una víctima «desamparada» y «humillada»: las claves de la dura condena a la manada de Palma
- La Policía de Ciutadella enseña el vídeo de la infracción a los que reclaman por las multas en Ses Palmeres
- Un conductor ebrio y con el carné caducado se empotra contra una mediana de la Ronda Sur