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El incendio de tres vehículos y un trastero en un garaje comunitario de la calle Font i Vidal, frente al Instituto Joan Ramis i Ramis, de Maó, provocó este lunes por la mañana momentos de desasosiego en la comunidad de vecinos que comprende los portales 9, 11 y 13 porque se desconocía si había alguien atrapado en la zona incendiada.

Faltaban pocos minutos para las 11 de la mañana cuando se escuchó una detonación desde el exterior del garaje, relataron dos jóvenes que dieron el aviso al 112. Tres vehículos, una motocicleta y dos turismos, además de un cuarto trastero situado detrás de esas dos plazas de parking, se habían prendido fuego sin que se conozcan las causas.

Los bomberos ventilaron el garaje lleno de humo y los vecinos de la primera planta tuvieron que ser desalojados. | Gemma Andreu

Las llamas no se extendieron a otros vehículos del garaje que aloja unos 55 turismos, pero sí afectaron a varios metros de tubos de aguas sucias de PVC que van por el techo del parking, y parte del cableado eléctrico lo que acabó provocando una inundación en la sala de máquinas de uno de los ascensores del edificio.

En pocos instantes una densa humareda negra, debido al plástico de las canalizaciones y a las carrocerías de los vehículos siniestrados, comenzó a salir de la puerta del garaje, en la calle Giusseppe Chiesa, y de los números 11 y 13 de la calle Font i Vidal.

Un policía ingresado por inhalación de humo

La Policía Local y dos ‘nacionales’ acudieron escasos minutos después cuando la voz de alarma ya había corrido entre varios vecinos del edificio. Una dotación del parque de bomberos de Maó, con seis efectivos, también acudió de inmediato como medida preventiva se ordenó el desalojo de todos los locales de la planta baja de la comunidad y las seis viviendas de la primera planta en las tres porterías.

Fueron desalojados seis pisos y varios locales del edificio. | Gemma Andreu

El agente que entró en uno de los portales para avisar a los vecinos fue quien precisó asistencia médica por inhalación del humo filtrado y extendido por todas las zonas comunes. El policía, de 35 años, fue atendido por sanitarios de la ambulancia en el exterior y, minutos después, traslado al Hospital Mateu Orfila donde no precisó quedar ingresado.

Los bomberos entraron en el garaje para iniciar las tareas de ventilación con una bomba de aire provistos de los EPI que les permitieron revisar todo el aparcamiento sin que, afortunadamente, hallaran a ninguna persona en su interior.

Pasadas las 12 del mediodía los vecinos desalojados pudieron regresar a sus viviendas tras recibir las indicaciones del jefe de bomberos de Maó, Juanjo Franch, por si hallaban alguna anomalía en sus casas.

El apunte

La Policía Nacional investigará las causas que provocaron el fuego

Una de las posibilidades es que el juego se iniciara en el cuarto trasero y de ahí se extendiera a la moto que estaba junto a la pared y a los dos vehículos estacionados a continuación. La unidad científica de la Policía Nacional, con el apoyo de los bomberos, iniciará hoy la investigación para determinar las causas. El parking volvió a estar abierto a los usuarios varias horas después cuando quedó totalmente ventinado, aunque el olor tardará días en marcharse.