El aeródromo de Sant Lluís es propiedad del Ministerio de Defensa.

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El Consell ha encargado un plan de viabilidad económico que dé solución al coste anual de estas instalaciones situadas en la carretera de Sant Lluís, después de solicitar la tasación que estaba muy por encima del precio final de compra. Concentran una extensión de 750.000 metros cuadrados, edificios, instalaciones, infraestructuras y cualquier otro contenido de la parcela contigua, en la que se halla situado el radiofaro VOR.

El ejecutivo insular, a través de la directora insular de Promoción Turística, Begoña Mercadal, aseguró ayer que en un mes y medio dispondrán del plan encargado para poder tomar decisiones. «Queremos saber las opciones que tenemos en función del coste del mantenimiento». Una vez esté disponible esta información el Consell prevé un calendario de actividades que ayuden a su mantenimiento. Como prioridad que justifica la compra, está la aviación en sí, y la infraestructura de emergencias para el territorio insular.

El acuerdo que trascendió hace meses fijaba un precio de 3 millones de euros que finalmente es el que se ha mantenido, a pagar en cuatro anualidades de 750.000 euros, cifra muy alejada de los 10 millones en los que inicialmente valoró los terrenos el Ministerio de Defensa, cuando decidió ponerlos a la venta.