El Ayuntamiento de Maó no ha ingresado este año ni un euro al Consorcio del Acantilado del Puerto. El motivo es que el objetivo a corto plazo que se han marcado los tres integrantes de este organismo es eliminar las importantes diferencias que existían al cierre de 2015 entre el dinero que había aportado el Consistorio desde la fundación del ente y las cantidades transferidas por el Consell y el Govern, a pesar de que el reparto de obligaciones entre los tres es equitativo. Entonces se analizará cuál debe ser el futuro de este ente instrumental creado en 2002, según explicó ayer el teniente de Alcaldía Vicenç Tur.
El presente ejercicio comenzó con una diferencia acumulada en las aportaciones que sumaba 637.000 euros (Maó llevaba ingresados en el consorcio 291.000 euros más que el Consell y 346.000 euros más que el Govern). Pero durante este año se ha reducido ya de forma considerable, con una aportación del Consell de unos 190.000 euros y de 56.000 euros del Govern, por lo que la deuda de estas dos administraciones con el consorcio (siempre en relación a lo aportado por el Ayuntamiento) está a día de hoy en 391.000 euros. Cabe señalar que a lo largo de 2015 el Consell aportó 55.775 euros y el Govern 90.156 euros, por los 122.447 euros del Consistorio.
A raíz de una pregunta formulada en el pleno por el concejal del PP Salvador Botella, Tur comentó que las diferencias se produjeron prácticamente desde la creación del consorcio, con un Govern que en las juntas del ente acordaba unas aportaciones que luego no reflejaba en sus presupuestos. Algunos ingresos extraordinarios paliaron en parte este desajuste.
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1 comentario
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Esta una muestra palpable de desidia institucional, de esta corporación, de la anterior, de la anterior.. y así sucesivamente. Estoy completamente seguro de que si el acantilado estuviese en la vecina Mallorca, haría muchísimo tiempo que se hubiese consolidado en su totalidad y hubiesen encontrado los fondos necesarios, como los encuentran para multitud de asuntos, mientras en Menorca, esperamos a que nos venga la inspiración, para hacer.... nada. Tanto es así, que últimamente ni nos quejamos.