Los alcaldes y la presidenta del Consell se ha reunido en El Toro | Josep Bagur Gomila

TW
1

La comisión de alcaldes celebrada este jueves en el Santuario del Toro ha sido el escenario de una despedida, la del obispo Salvador Giménez, y sirvió también para empezar a preparar una bienvenida, la que los municipios darán a los refugiados sirios que, según las previsiones del Govern, empezarán a llegar a Menorca en los primeros meses de 2016. La presidenta del Consell, Maite Salord, ha aprovechado la reunión para exponer a los alcaldes la propuesta de acogida de refugiados del Ejecutivo balear, que de acuerdo con los consells establece dos fases, una primera de entrada y adaptación en Palma y una segunda de asignación a cada Isla.

Aunque la sensibilidad hacia el problema es unánime, de momento la acogida volverá a ser un tema sobre la mesa de otra comisión de alcaldes, la prevista para el día 1 de octubre, ya que quedan detalles por concretar y es el Govern el que, en primera instancia, dará a conocer los cupos y su distribución a los consells y éstos a su vez a los ayuntamientos. Los primeros ediles quieren conocer a fondo cuáles son los compromisos que deben asumir para discutir con sus corporaciones la capacidad de acogida y respuesta de los servicios municipales.

Algunos ayuntamientos ya se han pronunciado a favor de crear una red de municipios de acogida de refugiados procedentes de Siria y también de Irak y Afganistán. Es el caso de Maó, Sant Lluís, Ferreries y Ciutadella. En Es Mercadal el grupo de la Entesa presenta al próximo pleno una propuesta para que el municipio se declare pueblo de acogida.

Salord también ha dado a conocer a los alcaldes la convocatoria de ayudas del programa Illes Intel·ligents de la Agenda Digital y ha manifestado el objetivo del Consell de elaborar un catálogo insular de caminos públicos.

La reunión ha contado  con la presencia de los ocho alcaldes de la Isla y, tras el encuentro, se celebró otro de signo distinto y no político: una comida y un acto de despedida del obispo, monseñor Salvador Giménez Valls, a quien se le obsequió con un grabado y un libro de la Reserva de Biosfera como recuerdo de Menorca.