Hay un cambio de tendencia política evidente, mucho más acentuado de lo que pronosticaban los sondeos. Puede que sean las primarias de las generales, pero lo que sí representa ya es un nuevo ciclo político local, insular y autonómico, con el reto de comprobar qué va a significar el cambio a un gobierno del PP con Vox. Una izquierda que durante la campaña ha mostrado las grietas provocadas por las relaciones entre los socios del Pacte, pasa a la oposición. Se frena así una gestión política inacabada. Basta recordar que el PTI se aprobó de forma definitiva cinco días antes de las elecciones y que el PP prometió cambiar si llegaba al gobierno. La lista de procesos en marcha que van a cambiar de dirección, tanto en el ámbito balear como en el insular, es enorme.