El alaiorense posa con la bufanda del Poblense, al que ha situado líder con sus goles

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Atiende la llamada de «Es Diari» tras una sesión en el gimnasio. Es lunes. Aitor Pons Goñalons (Alaior, 1991) no perdona una ocasión de mantener e incrementar el estado de forma que le ha llevado a ser, tras siete jornadas, el máximo goleador del grupo balear de la Tercera División.

El delantero menorquín, afincado de nuevo desde hace cuatro temporadas en la geografía balompédica de Mallorca, ha marcado siete goles repartidos en cuatro compromisos, aunque ha formado en el once titular en los siete partidos disputados hasta la fecha.

Los últimos goles, el sábado, en partido adelantado a la jornada. La víctima, el Ferriolense, se llevó tres de una tacada con el sello del alaiorense. Y su equipo, el Poblense, se mantiene al frente de la clasificación con 18 puntos, tres más que sus inmediatos seguidores, Peña Deportiva y Formentera.

«Fue un partido plácido», reconoce Aitor, «las tres primeras ocasiones que tuvimos marcamos. Dos fueron míos. En la segunda parte logré el tercero e incluso pude anotar otro». El jugador se ha convertido en la primera solución ofensiva del once azulgrana, «somos una plantilla joven, completa y competitiva» que responde a los objetivos fijados en el diseño del proyecto.

Aitor Pons es hoy el mejor artillero de la competición autonómica. Le siguen Juan Holanda (San Rafael) y Jaume Mairata (Alcúdia) con seis aciertos y con un menos el veterano jugador del Penya Ciutadella, Juanlu Sanz. Aitor tiene clara su meta, «espero superar los veintidós goles que marqué con el Montuiri».

No se trata de una postura egoísta, el jugador entiende que cuanto más acierte ante el marco rival «el equipo saldrá beneficiado e incrementaremos las opciones de estar arriba. Mi misión es dar lo máximo y mejor si es en forma de goles».

El jugador de Alaior se estrenó con un doblete en la primera jornada. Triunfo del Poblense ante el Rotlet-Molinar (1-3), sumó otro en la siguiente ante el Son Cladera (4-0). La visita a Sant Martí, pese al triunfo (0-1), abrió un paréntesis de tres partidos sin marcar que cerró frente al Esporles (3-0) y hasta el 'hat-trick' del sábado.

Aitor Pons no es solo sinónimo de gol, sino también de victoria cómoda. En los cuatro partidos que el menorquín ha visto puerta el Poblense ha sumado los doce puntos en juego y con una media de más de tres goles de ventaja en el resultado absoluto.

El Poblense apunta alto esta temporada. La mantenida vinculación con el Real Mallorca, por segunda temporada, cuenta con el técnico Óscar Troya -cedido por el club mallorquinista- como nexo de unión entre las dos entidades y además aporta un grupo de jóvenes jugadores con proyección, también cedidos por la factoría de Son Moix, para adquirir experiencia y formarse al lado de otros más contrastados en la categoría y superiores.

Como es el caso de Aitor Pons. El atacante no dudó en 'bajar' de nuevo a Tercera División junto a su entrenador fetiche en las Balears. «Hemos coincidido en el Montuiri, Constancia y Llosetense y no podía negarme a su nueva propuesta. Tenemos una buena relación y él deposita toda su confianza en mis posibilidades».

El objetivo del Poblense pasa por clasificarse entre los cuatro primeros y disputar la fase de ascenso a Segunda División B, de la quedaron fuera el curso pasado. Meta clara, aunque sin presión, «trabajamos para sumar los tres puntos en juego cada semana. No queremos mirar más allá, aunque sabemos que debemos estar arriba».

Cuatro sesiones semanales, más el paso voluntario por la sala de pesas, es el peaje que pagan gustosamente Aitor Pons y sus compañeros para intentar regresar a la categoría de bronce del fútbol español. Ante semejante reto, el delantero vislumbra «una liga más disputada que en años anteriores. Veo como rivales al mismo nivel a Peña Deportiva -único equipo que le ha derrotado (3-1)-, Formentera, Alcudia, Llosetense o Binissalem. Las plazas para la fase de ascenso van a estar muy caras».

En cuanto a la representación menorquina, Aito analiza en positivo la trayectoria futura de ambos, «me gusta el equipo que ha forjado el Penya Ciutadella. En casa se han hecho fuertes y van sumando, lograrán la permanecia». En cuanto al Mercadal, «cierto que tuvieron un mal comienzo, pero poco a poco se han recuperado y no dudo de que van a estar entre los seis o siete primeros». Vaticinios optimistas.