El Mercadal se vio frenado por el Penya Ciutadella en un derbi soso en la primera parte y que se animó tras el descanso al abrirse el marcador con el tanto de Calero. Luego, los de Dani Mori estuvieron mejor y lograron la justa igualada. En la imagen, Viroll intenta frenar a Jorge en una secuencia del partido | Kika Triay

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El derbi castiga al Mercadal y premia al Penya Ciutadella. Esta es la lectura que dejó el encuentro, pobre en su primera mitad, que se animó tras abrirse el marcador y que tuvo su dosis de polémica con el penalti favorable a los locales y otro que pidieron los visitantes. Lo cierto es que para los rojiblancos la cita de rivalidad frena sus opciones de pelear por la cuarta plaza. Una igualada paliada por el tropiezo del Alcúdia en el feudo del colista Santanyí (0-0) que deja a los de Lluís Vidal en idéntica situación y a la espera de lo que hagan hoy Formentera y Binissalem. Para los gualdiazules, que fueron mejores en los quince minutos finales, el empate les acerca un poco más a la permanencia que están saboreando.


El derbi fue descafeinado en el primer tiempo, plano, sin intensidad ni juego y con dominio local. El Mercadal intentó su habitual juego buscando las bandas pero se vio frenado por la buena disposición del Penya que trabajó agazapado esperando su oportunidad. El choque caminó sin alteraciones hasta que una internada de Lacueva desperezó al personal. Joel se encontró con Jesús y Aitor salvó el postrer remate de David Mas que se colaba (23'). En la recta final de la primera parte, el Penya tuvo más presencia en la zona local, Joel tiró arriba y Raúl cruzó fuera antes de ganar los vestuarios.


Cambio

Mori metió en la zaga a Fullana adelantando la posición de Raúl —comenzó de central— y Marcos y ello sirvió para que el Penya tomara ventaja. El Mercadal salió más entonado, intenso aunque el Penya avisó primero con un tiro de David Camps que salvó Óscar con problemas. El once de Vidal insistió y tras un córner al que no llegaron Capó y Héctor, el partido lo abrió Lacueva tras ser derribado por Maciá. El penalti —décimo para el Mercadal— lo anotó Calero engañando a Sastre. El gol tuvo el efecto contrario al esperado, el Penya se fue arriba y cinco minutos después pidió pena máxima por un derribo de Óscar sobre Llonga en una acción donde el meta pareció tocar el balón. Con superioridad en la zona ancha, el equipo de Mori logró las tablas en el siguiente intento tras cabecear Raúl una falta puesta por David Camps.

Vidal advirtió que la balanza se inclinaba para el rival y puso a Clavijo para equilibrar el centro del campo. El partido no tuvo dueño, fue un ir y venir sobre cada área y en este escenario el bloque ciutadellenc se movió con mejor criterio. David Camps, activo en la segunda parte, fue el estilete del Penya que buscó el triunfo. El Mercadal, sin frescura ofensiva, solo dispuso de un balón cruzado de Calero sin rematador. El propio Camps tuvo un freki en el interior del área y al final, Óscar desvió sendos remates envenenados del ariete y de Marcos.