Raül Riudavets | R.D.

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La I Cursa del Toro, a celebrar mañana en el pico insular con la finalidad de recaudar fondos para contribuir en la financiación de un estudio para combatir la osteogénesis imperfecta, rebasará las expectativas de participación más optimistas –el jueves la relación de inscritos ya rozaba el millar–, ante lo que los organizadores de la prueba (Raül Riudavets, Josep Garriga, el doctor Claudio Triay, además de Àngel Gomila y Eva Riva, padres de Martina, niña afectada de OI, y la que ha generado este aluvión de solidaridad de runners y población insular), por razones «de responsabilidad», se han visto en la necesidad de cerrar las inscripciones a través de la red. Apenas quedan unas plazas libres, que quedarán cubiertas en los prolegómenos de la carrera.

«Hemos tenido que hacer un pensamiento y poner un límite a las inscripciones, se trata de un acto de responsabilidad», explica Raül Riudavets, que pide «la comprensión de la gente» ante la situación –que hará que quizá no puedan entregarse dorsales o headband a todos los corredores. Asimismo, Riudavets, «muy agradecido» por la respuesta de la gente, pide que se acuda sobre «las 17 horas, no a las 18 horas», debido al colapso humano que se espera en la falda del Toro.


Dispositivo

El dispositivo de seguridad, en cualquier caso, está garantizado por Protección Civil. Además, la Cursa contará con dos ambulancias, y mantiene el horario de inicio para las 18 horas la prueba para menores y gente mayor, y a las 19 las otras dos (circuito verde y rojo), para las que se fijarán dos puntos de avituallamiento (preveniendo las altas temperaturas). La Cursa del Toro, un ejemplo de solidaridad sin precedentes.