La reunión del conseller, Gabriel Company con representantes del sector agrario.

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La Conselleria d'Agricultura introducirá cambios en el borrador de Ley Agraria para «pulir» algunos de los artículos sin que ello suponga en ningún caso cambios sustanciales en la filosofía del documento, según explicó ayer un portavoz de la Conselleria que dirige Gabriel Company.

Los cambios se producen después de que el departamento de Agricultura del Govern haya recibido informes que puntualizan algunos aspectos de la ley. Además del informe del Consell de Mallorca relativo a la posible vulneración de la normativa urbanística vigente, también hay informes del departamento de Turisme del Govern que cuestionan la ordenación legal prevista para las agroestancias.

La Conselleria d'Agricultura reconoció que ha habido informes diversos previos a la aprobación de la ley y que algunos de ellos han presentado observaciones relevantes al texto. No obstante, el mismo portavoz insistió en que el proyecto de ley mantendrá las cuestiones esenciales que justificaron su aprobación.

Aunque el Govern no quiso entrar en detalles acerca de las advertencias de legalidad de los informes, uno de los posibles fallos del texto se refiere a la invasión de competencias municipales, lo vulneraría la autonomía municipal y, por tanto, la legislación básica estatal.

Los matices

Tampoco hay acuerdo legal sobre el modelo elegido para favorecer la venta directa de productos, que entra en colisión con disposiciones de la Unión Europea, además de los problemas de encaje legal con la normativa turística actual de las estancias en las explotaciones.

Pese a todo ello, si en algo insisten en el departamento de Biel Company es que la ley saldrá a exposición pública en el plazo de dos semanas. Se abrirá así el proceso de presentación de alegaciones antes de que el Consell de Govern apruebe el proyecto de ley. Ese es el trámite previo a su entrada en el Parlament para su aprobación. Todo este proceso puede durar seis meses, de ahí las prisas del sector agrario para que el Govern apruebe el documento cuanto antes.

Las organizaciones agrarias han mantenido reuniones tanto con el conseller d'Agricultura como con la presidenta del Consell, Maria Salom, para hacerles extensivo el temor que existe entre los representantes del sector agrario.

Exposición pública

En su reunión con la presidenta del Consell el pasado viernes, el presidente de Asaja, Tomás Cortés, aseguro a Salom que, para evitar problemas de última hora, la ley debería estar ya en la fase de exposición pública. «Si esta ley no sale adelante, será una decepción total y absoluta para el sector, que ha depositado muchas esperanzas en este documento», dijo Cortés. «Los afiliados empiezan a estar nerviosos porque no se sabe en qué limbo se encuentra la ley», dijo.

El Govern quiso tranquilizar ayer a los agricultores, que en este asunto han mostrado una unanimidad total y no ha habido discrepancia en función de la asociación a la que pertenece. Reiteró que la ley se presentará en breve para que quede aprobada antes de que finalice la presente legislatura.