Infografía que muestra el aspecto del Port de Palma de realizarse el proyecto propuesto por la APB. | APB

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MÉS per Palma ha rechazado el proyecto «faraónico» y mastodóntico» que ha presentado la Autoridad Portuaria de Balears para ampliar el puerto de Palma y ocupar 340.000 metros cuadrados encima del mar.

Así, ante la preocupación que esta propuesta salga adelante, el portavoz del grupo municipal, Antoni Verger, preguntará en el próximo consejo de Gerencia de Urbanismo, previsto para el martes que viene, si el equipo de gobierno del Ajuntament está de acuerdo y ha dado su visto bueno al proyecto.

«No se puede derramar cemento ocupando más y más metros de mar con el objetivo de convertir el puerto de Palma en un parque temático del ocio y el turismo» ha afirmado Verger, quien ha apuntado que dicho proyecto está «alejado del modelo de ciudad que creemos que se tiene que potenciar, una ciudad histórica, rica en patrimonio y oferta cultural y gastronómica».

El GOB pide un debate público

Por su parte, el Grupo Balear de Ornitología y Defensa de la Naturaleza (GOB) ha reclamado hoy a la Autoridad Portuaria un debate público del proyecto de ampliación del puerto Palma para determinar si es o no de interés para la ciudad y Balears.

La reacción del GOB se produce al día siguiente de la Autoridad Portuaria anunciara un nuevo proyecto de ampliación que reduce a 34 hectáreas el terreno a ganar al mar, por debajo de las 100 hectáreas contempladas en el plan anterior.

«Queda claro que la gran apuesta de la Autoridad Portuaria sigue siendo potenciar el turismo de cruceros», ha apuntado el GOB.

Según esta organización balear comprometida con la defensa de la naturaleza resulta cuestionable que los cruceros proporcionen un auténtico beneficio «dado que estos monstruos de la mar que pueden trasladar hasta 5.000 personas hacen estadías muy cortas».

En este sentido, el GOB ha apuntado que considera que promover el amarre de grandes cruceros supone añadir al puerto de Palma el equivalente a unos cuantos municipios, con lo que resulta necesario readaptar un conjunto de infraestructuras básicas.

«Este proceso de aumento de la capacidad de las infraestructuras de transporte marítimo nos hipotecan el futuro, porque asumen que el crecimiento urbanístico y turístico se ha de seguir potenciando sin límites», ha destacado el GOB.

En opinión del GOB detrás de la promoción de este proyecto están los grupos de presión con intereses en el turismo y los sectores náutico, de la construcción y financiero «con la sumisión de prácticamente todo el espectro político».