Sánchez se dirige a descontentos con los pactos entre Feijóo y Abascal y dice que ambos son «el túnel del tiempo»

Unas horas antes del inicio oficial de la campaña, Sánchez ha pedido la confianza de una amplia mayoría de españoles, --«quizá muchos de ellos que no hayan votado al Partido Socialista nunca», ha señalado,-- pero que no les guste «un pelo» los pactos entre Feijóo y Abascal que se han visto en comunidades autónomas y ayuntamientos en las últimas semanas; que ha vuelto a calificar de «tráiler de película tenebrosa».

En este sentido ha indicado que en los últimos 20 días, a causa de estos acuerdos, se ha producido un retroceso en el debate público de 10 años en derechos de los trabajadores, de 20 años en derechos LGTBI, de 40 años respecto a los derechos de las mujeres y de 80 años en «censura a la cultura», según ha lanzado.

El líder del PSOE ha lanzado este mensaje en el acto de arranque de campaña electoral en el Pabellón de Convenciones de la Casa de Campo en Madrid, ante un auditorio lleno de 1.400 personas, según fuentes del PSOE, que indican que hubo otros 300 asistentes más que siguieron las intervenciones desde el exterior a través de pantallas. «A todos ellos les pido la confianza mayoritaria el próximo 23 de julio, para que España continúe avanzando cuatro años más y no retrocedamos ni un paso en derechos, en libertades, ni se frene el crecimiento», ha trasladado.

Durante su intervención, Sánchez también ha criticado que mediante estos pactos, las fuerzas de la derecha hayan puesto al frente de instituciones a personas «antivacunas», que niegan la violencia de género o el cambio climático, cuando España es un país avanzado en el reconocimiento de estos problemas sociales, según ha afirmado. En este sentido ha señalado que los votantes de PP y Vox «son mucho mejor que sus dirigentes».

En este sentido, fuentes de la dirección del PSOE señalan que existe un votante de centro o centro derecha, que se sitúa en el 5 o el 5,5 en una escala ideológica, que está molesto con los acuerdos alcanzados por PP y Vox, del mismo modo que al votante socialista más centrado le incomodan los pactos con Bildu, señalan. En todo caso señalan que su objetivo no es conseguir votos procedentes del PP sino movilizar a su electorado, que no ha acudido a las urnas en las últimas citas.

«Si conseguimos que los nuestros vayan a votar, ganamos», sentencian. Además, respecto al nivel de movilización de su electorado, señalan que puede aparecer bajo en las encuestas pero que detectan que están movilizando mucho voto que elegirá por primera vez una papeleta de izquierdas y que por tanto, no queda reflejado en los sondeos.