El Pastor Alemán al tener el pelaje largo resiste mejor el frio que los Galgos. | Yan Krukau

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A menudo nos preguntamos si nuestros fieles amigos, los perros, sienten frío de la misma manera que nosotros. La respuesta es sí. A pesar de su pelaje, no están inmunes a las bajas temperaturas y pueden sufrir hipotermia o, simplemente, sentirse incómodos durante los meses más fríos del año. Es esencial tener en cuenta una serie de consejos y precauciones para garantizar el bienestar de nuestras mascotas en invierno.

Antes de tomar medidas, es fundamental conocer las señales que indican que tu perro puede estar sintiendo frío. Las señales son temblor constante, actitud retraída o menos juguetona, buscar refugio o intentar esconderse, patas frías o sequedad en las almohadillas. No todos los canes necesitan ropa, pero hay razas con pelajes más finos como el galgo, o perros ancianos que pueden beneficiarse de una capa adicional para mantener el calor. Existen abrigos y jerseys especialmente diseñados para perros que les proporcionan calor sin limitar su movimiento.

Paseos e hidratación

Las almohadillas de las patas de los perros pueden agrietarse y secarse debido al frío y la nieve. Usa botas protectoras para perros o aplica bálsamos específicos para proteger sus patas. Además, siempre limpia sus patas después de cada paseo para eliminar residuos de sal o productos químicos que se utilizan para derretir el hielo en las calles.

Si las temperaturas son muy bajas, es aconsejable reducir la duración de los paseos. Sin embargo, sigue ofreciendo a tu mascota la oportunidad de hacer ejercicio, incluso si es en el interior de tu hogar. Asegúrate de que tu perro tenga un lugar cálido y seco donde descansar. Si pasa mucho tiempo al aire libre, es fundamental tener una caseta bien aislada. En el interior, proporciona una cama cómoda alejada de corrientes de aire.

El anticongelante es altamente tóxico para ellos, aunque a menudo les atrae por su sabor dulce. Asegúrate de mantener estos productos fuera de su alcance y limpia cualquier derrame de inmediato. Aunque podría parecer que necesita menos agua en invierno, en realidad necesita mantenerse bien hidratado para mantener la temperatura de su cuerpo. Asegúrate de que siempre tenga agua fresca a su disposición. Además, algunos perros pueden necesitar más calorías en invierno para mantenerse calientes, así que consulta a tu veterinario sobre las necesidades alimenticias de tu mascota durante estos meses.

Bañar a tu perro con mucha frecuencia en invierno puede resecar su piel. Si es necesario bañarlo, asegúrate de secarlo completamente antes de permitirle salir al exterior. Proteger a nuestros mejores amigos del frío es una responsabilidad que todos los propietarios deben asumir durante los meses de invierno. Con la información adecuada y algunas medidas preventivas, podemos garantizar que estén cómodos, seguros y felices, sin importar cuán frío esté afuera.