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Estudiantes de la Universitat de les Illes Balears han organizado una acampada en el campus en favor de Palestina. Se trata de un movimiento estudiantil que se inició hace unas semanas en Estados Unidos con violentos incidentes y se ha extendido a distintas ciudades en prácticamente todos los continentes. Los participantes explican que es una protesta reivindicativa «no festiva», por la tragedia humanitaria en Gaza, donde el Ejército israelí sigue combatiendo a los terroristas de Hamás y los daños colaterales son terribles. En estos meses ya han fallecido 35.000 palestinos -la mayoría de ellos civiles inocentes- por los bombardeos e incursiones del poderoso ejército hebreo.

Los manifestantes insisten en que semejante catástrofe está condenando a una generación entera de gazatíes y deja sin esperanza a los jóvenes. Denuncian a Israel por llevar a cabo una «limpieza étnica» y que el Gobierno de Netanyahu pretende ocupar aquel territorio palestino a orillas del Mediterráneo, como ha hecho con otras zonas árabes. De igual manera, alertan de que los colonos de Cisjordania, el otro terreno de Palestina, son cada vez más violentos, y que el Gobierno judío los ampara al legalizar nuevas colonias ilegales. En conjunto un polvorín que amenaza y pone en peligro toda la estabilidad en la región, donde Irán apoya abiertamente a los combatientes de Hamás y Hizbulá.