Que disfruten!...civilizadamente.
La normativa me pot agradar o no. Però si hi ha unes normes de comportament en qualsevol lloc o àmbit, hi són per complir-les. No pot ser que aquí qualsevol véngui a fer el que vulgui. Ni els qui vénen de fora ni els qui som d'aquí.
S unic problema que veig es es fer foc.....per lo demes.......no se q tanta queixa.....sa platja es de tots i per tots, ja vagis a peu amb cochu, barca o demunt sa somera....
Hay que denunciar siempre, pero solo siempre que sea denunciable, esto es envidia, o porque alguien tiene un problema de posesión sobre la caleta.
Feis una volta per Cala Pudent.....alla sembla un port esportiu i un camping a una de ses pletjetas....ahhh pro com son gent d'aqui....
Nada.!!! Cuatro bolardos y listo... La queja y la envidia deporte olimpico en Menorca.!!
No doy crédito a lo que estoy leyendo. Precisamente ayer por la mañana (viernes) estuve en esas rocas y no había rastro de nada. De hecho estaba más limpio que de costumbre (voy a menudo a ese lugar). Y lo del fuego, ... no hay vegetación en 300 m. a la redonda y lo hicieron en la orilla. ¿Dónde está el problema?
Otra solución puede ser la de poner letreros, tamaño visible, en todas las caletas y plaitas donde se prohíba encender fuego y prohibido dejar escombros
¿Como que hay gente que acampa y esta cenando en Pregonda?.Vaya se ve que no saben que en Pregonda siempre se ha acampado y cenado a la orilla de la playa.Mientras sea en los chalets de los ricachones que tienen sus chalecitos a la vera del mar...
No se trata de prohibir y no disfrutar. Se trata de tener sentido común. A quién se le ocurre encender una fogata? Es agosto, y el riesgo es altísimo. Da igual que sean de fuera o de aquí. Hay que cuidar el entorno sin dejar de disfrutar. Unas coca y unas latitas y listo! Y a las personas menorquinas que tanto os quejáis que no podéis disfrutar de la isla, comprobado está que las nuevas generaciones no cuidan su isla. Vergüenza y pena daba ver La Vall y Es Bot después de una noche de luna llena donde durmieron varios grupos de adolescentes menorquines y lo dejaron hecho una porquería. Más educación y después una acampadita. Sin amor al medio ambiente nos lo estamos cargando. Si todos fuésemos más cívicos, no sería necesario prohibir. Pero es una tarea pendiente y que no todos quieren aprender.