Un terrible accidente
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El accidente del pasado sábado, poco después de las 19 horas, en la rotonda de la Me-14 más próxima al polígono de Maó cuarta fase, con seis víctimas mortales, cuatro de ellas menores de edad, ha tenido un impacto terrible y ha provocado un dolor inmenso entre las familias y quienes les conocían y también en la sociedad menorquina, especialmente la mahonesa. La ciudad ha quedado sumida durante unos días en un duelo, que los ayuntamientos de Maó y Sant Lluís han declarado de forma oficial. El dolor y el respeto se percibía en las calles de la ciudad. Esta puede ser una percepción subjetiva, pero coincide con el comentario compartido por varias personas.
El trágico accidente ha afectado también a los profesionales que han tenido que intervenir. A los bomberos, los agentes y los sanitarios y otros profesionales que actuaron en los primeros momentos en unas circunstancias muy difíciles. Y después a los alumnos y profesores del colegio Mateu Fontirroig y el instituto Cap de Llevant, donde estudiaban los menores fallecidos. Desde Es Diari se ha cumplido con la obligación de informar, de una forma rigurosa, con tres criterios: ofrecer todos los datos relevantes y la búsqueda de la información contrastada, prescindir de cualquier dato innecesario para no alimentar el morbo, y tratar con respeto todos los contenidos. Estamos convencidos que la información contrastada ha servido para desmentir bulos y falsedades que han circulado por las redes. Por eso, creo que es de valorar el trabajo del redactor jefe Miguel Juan Urbano, el editor de mesa el día del accidente, Pep Mir, otros periodistas que han intervenido y el equipo de redactores de la edición digital.
¿Cómo se produjo el accidente? Hemos aportado en el periódico los datos principales, sin especulaciones y avalado por fuentes oficiales. Al lado del conductor Javier Fluxá iba su hija Blanca y detrás, Araceli con sus tres hijos, Elena, Gonzalo y Rodrigo. Ellos cuatro iban sin cinturón de seguridad. El vehículo circulaba en dirección al aeropuerto, por tanto iba cuesta arriba, aún así no redujo la velocidad, pasó por encima de la rotonda por el lado derecho, siguió en línea recta, no hay manchas de frenazo en el asfalto, hasta que impactó con el muro del terraplén. Todos estos datos avalan la hipótesis de que el conductor tuvo una grave indisposición, que pudo dejar el vehículo sin control y quizás por este motivo no levantó el pie del acelerador. Los forenses han realizado todas las autopsias y se está pendiente del análisis del Instituto de Toxicología y Ciencias Forenses de Barcelona, cuyo informe final puede demorarse bastante tiempo.
¿Cómo se ha respondido a esta tragedia? Ante el inevitable dolor, creo que la respuesta ha sido ejemplar. La forma en que lo ha vivido la familia forma parte de su intimidad y no tiene interés público. Y eso se ha respetado, al menos de forma general. Aunque es verdad que, en un tema de tanto impacto, han circulado datos y conclusiones falsas. De hecho, la proliferación de comentarios anónimos especulando sobre las causas del accidente motivaron que cerráramos la noticia a comentarios en la edición digital del periódico.
El resto de reacciones se han caracterizado por la profesionalidad, la dignidad y el respeto. Desde los bomberos, los policías, los sanitarios, el personal jurídico, los sacerdotes en una labor de acompañamiento espiritual, hasta la sociedad en general. El cariño expresado ha sido un sedante ante el dolor para muchos de los familiares, como se pudo vivir en los dos funerales. Y la respuesta en los dos centros escolares, con el apoyo de los psicólogos, ha sido sido también ejemplar. La activación de un protocolo para este tipo de situaciones ha permitido que los compañeros de clase pudieran expresar y compartir sus sentimientos para comprender una situación que nos supera a todos.
Este accidente nos demuestra que no todo se puede prevenir. Y ante una desgracia inevitable, hay que valorar la respuesta profesional y social.
Como director del diario me gustaría hacer llegar un abrazo solidario a todos los familiares de los seis fallecidos.
Hasta la próxima semana.